Nuevas tendencias en el trabajo de auditoría y el futuro de la rendición de cuentas

por Jacek Mazur, Doctor, Asesor del Presidente, Tribunal Superior de Cuentas de Polonia

INTRODUCCIÓN
El mundo está cambiando, y las Entidades Fiscalizadoras Superiores (EFS) están evolucionando. En los últimos 20-30 años, las EFS -lenta y gradualmente- han ido transformando sus métodos de trabajo para abordar mejor los factores externos, como los cambios en el Estado y la sociedad. La identificación de tendencias es una empresa valiosa que facilita el debate, promueve el intercambio de ideas y potencia los esfuerzos globales.

Motivadas por una fiscalización realizada por el Tribunal de Cuentas Europeo y basadas en investigaciones, así como en debates con miembros de la comunidad fiscalizadora internacional, las tendencias clave en las prácticas internacionales de fiscalización se presentaron en el artículo “Inspired by the ECA’s Audit-New Trends in the Works of Supreme Audit Institutions”, publicado recientemente en la “Kontrola Państwowa” editada por la EFS de Polonia. Este artículo ofrece un breve resumen de las tendencias y comparte una visión de cómo configurarán el futuro de la rendición de cuentas.

Mejora de las Orientaciones de Auditoría Pública. El trabajo de la INTOSAI sobre la orientación de la auditoría pública comenzó hace más de 50 años. Aunque se ha avanzado en los últimos años, aún queda mucho por hacer. En particular, las normas internacionales de auditoría no expresan diferencias entre las auditorías del sector público y privado. Por ejemplo, las Normas Internacionales de Auditoría (NIA), emitidas por la Federación Internacional de Contables (IFAC), son de obligado cumplimiento. Aunque la INTOSAI sigue sistematizando orientaciones y promoviendo la adopción y aplicación por parte de las EFS, las normas no son vinculantes. Muchas EFS operan sobre la base de legislaciones nacionales o criterios autoestablecidos.

Empleo de estrategias plurianuales de auditoría. Las EFS han ideado y aplicado cada vez más mecanismos de planificación estratégica desde que se introdujeron por primera vez en los años ochenta. En la actualidad, las EFS que poseen diversos mandatos, procedimientos y tipos de auditoría están desarrollando planes estratégicos. A pesar de estas diferencias organizativas y regionales, los planes suelen considerar aspectos similares, como las operaciones estatales, que suelen dirigir el trabajo de las EFS, las normas de auditoría, la cooperación entre las partes interesadas, los recursos humanos y la organización y gestión internas.

Selección de temas no rutinarios. En general, las auditorías del sector público pueden clasificarse en uno o varios de los tres tipos principales siguientes: auditorías financieras, de cumplimiento y de gestión. La auditoría de gestión examina la eficiencia y eficacia legislativa y ejecutiva en la preparación y ejecución de las decisiones y si los contribuyentes o ciudadanos han recibido una buena relación calidad-precio.

Las auditorías sobre temas no rutinarios están en constante aumento, muchos de los cuales son políticamente sensibles dadas las posibles conexiones con programas públicos prioritarios del gobierno. Aunque es esencial que las EFS actúen con cautela para no excederse en sus mandatos, las auditorías que abordan áreas como las actividades de los partidos políticos y los actos de votación, la ética en la administración pública, la transparencia y la integridad, están recibiendo más atención.

El Contralor del Estado de Israel, por ejemplo, realiza auditorías basadas en criterios establecidos de legalidad, economía, eficiencia y cumplimiento de los principios de buen gobierno. La oficina también utiliza una perspectiva de integridad moral. Sobre esta base, el Contralor del Estado ha informado muchas veces al Parlamento sobre casos de infracción de valores éticos, como la celebración por organismos públicos de contratos de bienes o servicios por motivos políticos o en beneficio de familiares o amigos.

Informando al Público. La orientación internacional insta a las EFS a mantener informado al público, especialmente mediante la publicación de informes de auditoría y la garantía de que los procesos de trabajo, las actividades y los productos sean transparentes. De igual importancia, se sugiere que las EFS, de conformidad con los mandatos y los marcos legales vigentes, hagan que la información sea fácilmente accesible y relevante.

Gran parte de las EFS publican planes de trabajo anuales. Algunos van un paso más allá al publicar información sobre auditorías que aún no se han completado (tanto la NAO de Australia como la NAO del Reino Unido actualizan a las partes interesadas sobre las auditorías de desempeño en curso).

Varias EFS, incluidas las EFS de Estonia y Eslovenia, proporcionan información resumida sobre todas las auditorías incluidas en el plan de trabajo anual. Desde 2007, la Oficina Superior de Auditoría de Polonia publica (generalmente en diciembre) un plan de auditoría detallado para el año siguiente. En años más recientes, este plan ha incluido detalles sobre componentes como el tema de la auditoría, preguntas que definen los principales objetivos de la auditoría, el tipo de auditoría, las fechas clave y el departamento que dirige la auditoría.

Esta transparencia ha llevado a una mayor necesidad de datos digitales, que se ha vuelto cada vez más frecuente entre las EFS. Muchos están desarrollando actividades analíticas paralelas a la digitalización del trabajo de supervisión, como el uso de análisis de big data, el aprovechamiento de la documentación electrónica proporcionada por los auditados y la mejora del software para respaldar los procedimientos de auditoría.

Expansión de la participación ciudadana y el compromiso de las partes interesadas. El compromiso con el principio de que, además del parlamento y el gobierno, los ciudadanos son los principales interesados, se ha generalizado entre las EFS.

Las EFS están incluyendo cada vez más a los ciudadanos (y otras partes interesadas) en el trabajo de auditoría al brindar oportunidades para enviar información y comentarios, como la Oficina Nacional de Auditoría de Australia (NAO), que pide a los ciudadanos que contribuyan al realizar auditorías de desempeño. De manera similar, para aproximadamente el 25% de sus auditorías de desempeño, la NAO del Reino Unido alienta a los ciudadanos y partes interesadas a compartir datos (evidencia).

Las EFS también están realizando encuestas durante las auditorías e invitando a ciudadanos y organizaciones de la sociedad civil (OSC) a proporcionar información para su posible inclusión en auditorías seleccionadas. Un ejemplo especial de participación ciudadana proviene de la Comisión de Auditoría de Filipinas (COA), donde se llevan a cabo algunas auditorías de desempeño con la participación de representantes de OSC.

CONCLUSIÓN
Este artículo presenta una breve sinopsis de las tendencias recientes en las prácticas de las EFS, algunas aplicadas por muchos, algunas raras y otras experimentales, que pueden continuar dando forma a la profesión de auditoría en los años venideros.

Acceda al artículo completo, que presenta una descripción de las tendencias de auditoría de ECA y práctica de SAI en mayor detalle, en línea o mediante descarga. Para obtener más información, póngase en contacto con el autor en jacekmazur398@gmail.com.